
Tras su exitoso paso por el FC Porto, donde conquistó la Champions League 2003-2004, José Mourinho asumió el mando del Chelsea en la temporada 2004-2005. Desde su llegada, revolucionó al club con su estilo táctico, disciplina defensiva y una confianza arrolladora que rápidamente se tradujo en resultados históricos.
En su primera temporada, Mourinho llevó al Chelsea a ganar la Premier League 2004-2005 con un récord de 95 puntos, la mayor cantidad lograda hasta ese momento, y estableció una racha impresionante de 25 partidos invictos. Además, su equipo concedió solo 15 goles en toda la campaña, marcando un nuevo estándar de solidez defensiva.
El éxito continuó en la temporada 2005-2006, donde Mourinho consolidó su hegemonía al conseguir un segundo título consecutivo de Premier League, algo que el Chelsea no lograba desde la década de 1950. Durante esos años, figuras clave como Frank Lampard, Didier Drogba, John Terry y Petr Čech fueron pilares fundamentales en el sistema del entrenador portugués.
Mourinho no solo dejó su huella por los títulos, sino también por su personalidad carismática y su capacidad para elevar el nivel competitivo del Chelsea, sentando las bases del éxito del club en la era moderna del fútbol inglés.
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