
La Copa Mundial de Fútbol de 1958, celebrada en Suecia, marcó un punto de inflexión en la historia del fútbol, destacando por su innovación, el ascenso de una leyenda y el establecimiento de Brasil como una potencia mundial. Este torneo, el sexto organizado por la FIFA, reunió a 16 selecciones y presentó un nivel de juego que cautivó a aficionados de todo el mundo.
Innovaciones y Formato
Suecia fue la primera sede en ofrecer transmisiones televisadas a nivel internacional, lo que permitió que millones de personas siguieran el torneo desde sus hogares. El formato incluyó una fase de grupos inicial seguida de eliminatorias directas hasta la final. La FIFA introdujo un criterio de desempate basado en partidos de desempate en lugar de diferencia de goles, lo que añadió dramatismo a los encuentros.
Participantes y Grandes Favoritos
El torneo contó con la presencia de equipos tradicionales como Brasil, Alemania Occidental (vigente campeón), Hungría y Inglaterra, junto con debutantes como Irlanda del Norte y la Unión Soviética. Por primera vez, todos los continentes reconocidos por la FIFA estuvieron representados.
El Nacimiento de una Estrella
La selección de Brasil, que había quedado cerca de la gloria en ediciones anteriores, llegó con un equipo renovado. Entre sus filas destacaba un joven de 17 años llamado Pelé, quien se convertiría en la figura más importante del torneo.
Brasil debutó con fuerza en la fase de grupos y avanzó con solidez a las fases finales, superando a equipos como Gales en cuartos de final, donde Pelé marcó su primer gol mundialista. En semifinales, Brasil venció a Francia, liderada por el goleador Just Fontaine, quien anotó 13 goles durante el torneo, un récord aún vigente.
La Gran Final
El 29 de junio de 1958, en el estadio Råsunda de Estocolmo, Brasil se enfrentó al anfitrión, Suecia, en una final inolvidable. A pesar de que los suecos abrieron el marcador, Brasil remontó con un juego deslumbrante y venció 5-2. Pelé, con solo 17 años, anotó dos goles, incluido uno que es considerado uno de los más bellos en la historia de las finales mundialistas. Brasil obtuvo su primer título mundial, y Pelé se consolidó como la nueva estrella del fútbol internacional.
Aspectos Destacados
- Just Fontaine, de Francia, fue el máximo goleador del torneo con 13 goles.
- Brasil introdujo por primera vez su icónica camiseta amarilla, que se convertiría en símbolo del «jogo bonito».
- Fue el primer torneo en el que una selección sudamericana ganó en suelo europeo.
Fase de Grupos
Grupo 1:
- Alemania Occidental 3–1 Argentina
- Irlanda del Norte 1–0 Checoslovaquia
- Argentina 3–1 Irlanda del Norte
- Alemania Occidental 2–2 Checoslovaquia
- Checoslovaquia 6–1 Argentina
- Alemania Occidental 2–2 Irlanda del Norte
Clasificados: Alemania Occidental, Irlanda del Norte (desempate).
Grupo 2:
- Francia 7–3 Paraguay
- Yugoslavia 1–1 Escocia
- Yugoslavia 3–2 Francia
- Escocia 2–3 Paraguay
- Paraguay 3–3 Yugoslavia
- Francia 2–1 Escocia
Clasificados: Francia, Yugoslavia.
Grupo 3:
- Suecia 3–0 México
- Hungría 1–1 Gales
- Suecia 2–1 Hungría
- Gales 1–1 México
- Hungría 4–0 México
- Suecia 0–0 Gales
Clasificados: Suecia, Gales (desempate).
Grupo 4:
- Brasil 3–0 Austria
- Inglaterra 2–2 Unión Soviética
- Brasil 0–0 Inglaterra
- Unión Soviética 2–0 Austria
- Unión Soviética 0–2 Brasil
- Inglaterra 2–2 Austria
Clasificados: Brasil, Unión Soviética (desempate).
Cuartos de Final
- Alemania Occidental 1–0 Yugoslavia
- Francia 4–0 Irlanda del Norte
- Brasil 1–0 Gales
- Suecia 2–0 Unión Soviética
Semifinales
- Brasil 5–2 Francia
- Suecia 3–1 Alemania Occidental
Tercer Lugar
- Francia 6–3 Alemania Occidental
Final
- Brasil 5–2 Suecia
Estadio: Råsunda, Estocolmo.
Goles: Pelé (2), Vavá (2), Zagallo; Liedholm, Simonsson (Suecia).
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